Normalmente, se podría pensar que cualquier persona que consume cannabis comestible o bebidas de marihuana regularmente no podrá desempeñar sus tareas cotidianas cabalmente. Esto, sin embargo, esta sorprendentemente lejos de la realidad.

El problema surge cuando o bien por una falta de congruencia, falta de paciencia, o tal vez la falta de experiencia, sufres de una sobredosis por comer marihuana. Tristemente, todos los factores mencionados anteriormente lo están convirtiendo en una situación cada vez más común. Antes de ahondar demasiado profundamente en nuestra colección de recetas, pensemos que podría ser una buena idea hablar acerca de por qué la gente termina experimentando una sobredosis por cannabis comestible y la forma en que se pueden prevenir.

Comencemos a abordar el tema.

Vamos a empezar por el principio, ¿Qué hace que la marihuana comestible sea tan común? Realmente algunas cosas se pueden atribuir a la creciente popularidad de estas golosinas que pueden cambiar rápidamente tu estado de ánimo.

La principal ventaja de las golosinas cannábicas es que son muy oportunas para consumir en cualquier ocasión . Lo puedes hacer camino al aeropuerto, cines, conciertos y otras muchas zonas en las que no suele ser capaz de usar la marihuana.

Sin embargo, aun cuando sabemos que la marihuana tiene una base de fans muy constantes que van desde médicos, atletas, e incluso empresarios. Muchas de estas personas se preocupan profundamente por su salud y prefieren comer marihuana para evitar la inhalación de humo. No hay ninguna quemadura severa y generalmente los productos comestibles les dejan un sabor bastante agradable.

Otra enorme ventaja es que las golosinas de marihuana son portátiles, sabrosa, y una actividad de bajo perfil en comparación con fumar hachís. Lo que las convierte en una opción atractiva incluso, se pueden ocultar a la vista ya que a menudo no se parecen a nada ni remotamente relacionado con la marihuana. No hay nada que fingir simplemente toma su producto comestible y lo introduces a tu bolso o bien preparas tu bebida cannábica y la viertes en una botella camuflaje.

Otro punto a favor es la asequibilidad, pues la marihuana comestible es una opción asequible y se pueden comprar en una sola (o múltiples) porciones que van en cualquier lugar por unos cuantos euros.

Comienzan los problemas.

Todas las ventajas anteriormente mencionadas hacen que el cannabis comestible sea una gran opción, pero algunas de estas cualidades han hecho que las cosas sean un poco demasiado fácil. Con el éxito continuo de la marihuana medicinal, y el comienzo de la legalización, ahora hay más opciones que nunca de consumir libremente marihuana. Desde palomitas, chocolates, galletas, helados. Si bien la diversidad de estos productos es muy diversa y divertida, también conlleva un problema grave que se reduce en una sola palabra; la dosis. Diferentes productos vienen en diversas formas, tamaños y sabores. Puede que sea demasiado fácil de comer una bolsa entera de palomitas cheddar, o para beber un litro de infusión de marihuana. Pero la marihuana y los efectos que podría desatar ingerirla de esta forma podrían llegar a ser muy peligrosos. Por otra parte ¿Cómo se puede dosificar con precisión? O ¿Cómo se puede estar seguro de que se corta una barra de caramelo 16 piezas exactas? La combinación de estos factores con la posibilidad de que muchas cepas se potencializa demasiado al entrar en contacto con el calor o que los efectos deseados suelen experimentarse mas lentamente pueden causarte un verdadero problema.

Cada persona tiene una reacción diferente a los efectos de la marihuana comestible, pero el factor principal es la tolerancia. Ayer comiste un brownie y te sentiste muy medicado, pero sentías que podría haber comido más, compartiste uno de esos mismos brownies de chocolate a tu primo, y se puso a correr desnudo 7 calles abajo gritando que puede ver a Dios. Tenemos que considerar todos estos factores y preguntarnos de manera consiente, ¿Cómo puedo consumir el cannabis comestible de forma segura?

La regla de oro que más me gusta a la hora de comer golosinas cannábicas es quizás la de Korova compañía de productos comestibles. En el paquete de su famosa barra de chocolate hay un lema que dice "Siempre se puede comer más, pero nunca se puede comer menos". Esto es muy sencillo, sin embargo, mucha gente suele pasarlo por alto. La marihuana comestible puede tomar de 1 a 3 horas para activarse plenamente, un sinnúmero de personas comete el error de impacientarse y consumir otra dosis sin esperar el tiempo suficiente. Korova es conocido por hacer comestibles extremadamente potentes. Por lo que lo más recomendable es tomar solo la dosis recomendada.

Consejos útiles para consumir cannabis comestible

Trata de respetar las porciones o bien fragmentarlas de la manera más precisa posible. Si el artículo que está comprando contiene más de una dosis, asegúrese de cortar una porción tan exactamente como te sea posible. Nunca muerdas el producto esperando que esta sea una medida aceptable, utiliza un cuchillo y no tenga miedo de medir incluso lo que está cortando. Personalmente, me gusta medir mis brownies para después cortarlos y así evitar desniveles.

Siempre es mejor comenzar con la dosis más baja recomendada. Incluso esto no garantiza que el cannabis comestible no será demasiado fuerte para ti, pero es un buen punto de partida.

Toma en cuenta lo que ha comido antes que el brownie. Un estómago lleno puede disminuir ligeramente los efectos de lo que está comiendo, y también retrasará los efectos. Un estómago vacío puede causar efectos más fuertes y rápidos.

La marihuana comestible es quizás uno de los métodos más fuertes de consumo de la planta. Incluso si eres un fumador experimentado deberías de acercarte con cautela a los comestibles. Lo más probable es que tengas algo de una tolerancia, sin embargo, no es lo mismo ingerirla que fumarla.

Si tienes paciencia y sigues estos consejos, es casi imposible tener una experiencia desagradable con la marihuana comestible. Corre la voz entre tus amigos.