Los ciclos de luz y la floración del cannabis constantemente generan una gran cantidad de preguntas acerca de los tipos de cannabis y su sexo. Bien para determinar si tu marihuana es macho o hembra deberá simplemente observar los órganos reproductores. Me gustaría compartir con ustedes algunas de las técnicas más avanzadas para determinar el sexo de plantas de cannabis. Quizás algunos productores más experimentados pueden beneficiarse también.

Signos de la marihuana macho.

En la marihuana macho las flores se parecen a unas bolas cuelgan de un tallo delgado. Los brotes pre-flores se asemejan en apariencia a una pelota de rugby con botones al final. Cuando las flores masculinas empiezan a madurar, la transición de la que cuelga pasa a una posición más erguida sobre su tallo. Cuando las flores se abren, revelan cinco pétalos de color amarillo o blanco y un estambre central que libera el polen en forma de brisa.

Características de la marihuana hembra.

Las flores de la marihuana hembra se identifica por la presencia de sus pistilos. No tienen pétalos en las flores como las de las plantas macho, sino que producen dos estigmas largos y delgados que se extienden y que pueden ser de color blanco a rosa o lavanda. Estos estigmas recogen el polen liberado en el aire por las plantas macho, y lo guardan internamente en los ovarios que polinizan el óvulo y producen el embrión. Una vez que el estigma ha hecho su trabajo, el embrión comienza a crecer en una semilla. El estigma ya no es necesario y se seca pocos días después. El ovario en la base de los pistilos comienza a crecer pues se está produciendo una semilla.

Y ¿las flores hermafroditas?.

Las plantas de cannabis son fundamentalmente macho o hembra, sin embargo, ambos tipos de marihuana tienen la capacidad de convertirse en hermafroditas. Esto significa que una planta de marihuana hembra tiene la capacidad de hacer crecer órganos sexuales masculinos y producir polen y que las plantas macho pueden producir pistilos femeninos. Aunque debemos especificar que las plantas masculinas hermafroditas son de poco interés por lo que generalmente son removidas del cultivo. Por otro lado, las plantas femeninas que poseen órganos sexuales masculinos pueden polinizarse a sí mismas y otras plantas femeninas cercanas.

De las plantas femeninas se pueden producir semillas que degrada la calidad del cannabis cosechable. Esto se debe a que el hermafroditismo puede ser provocado por estrés, ciclos de luz erráticos, los tratamientos químicos, o bien por predisposición genética. Las semillas creadas por la polinización hermafrodita usualmente deben desecharse, ya que son más propensas a pasar por estas circunstancias.

Las flores femeninas que alcanzan la madurez sin ser polinizadas por las masculinas se les conocen como sinsemilla. Algunos productores prefieren las flores sin semillas ya que suelen ser más grandes y contienen niveles más altos de cannabinoides. Debido a que las plantas de cannabis son dioicas, las flores masculinas y femeninas no se producen en la misma planta. Esto significa que los sexos, una vez identificados, se pueden separar fácilmente para evitar la polinización.

El polen de una flor masculina puede polinizar docenas de plantas femeninas, convirtiendo tu cosecha en una acribillada producción de sinsemilla. Obviamente se trata de un escenario poco ideal que los productores quieren evitar a toda costa. Conociendo como diferenciarlas y removiendo la marihuana macho esta circunstancia será fácil de evitar.

Método natural.

Elegir el sexo de las plantas de cannabis es más difícil cuando aún están en la fase de crecimiento vegetativo, pero no es imposible. A menudo, una flor solitaria aparecerá dos a cuatro nodos hacia abajo desde la parte superior de la planta. Estos son generalmente muy pequeñas y pueden ser difíciles de identificar sin ampliación. El inconveniente de este método es que los machos suelen mostrar antes que las hembras y los productores a menudo las identifican incorrectamente y desechan algunas plantas de marihuana hembra accidentalmente.

Sin embargo, las plantas de cannabis en cualquier etapa de crecimiento vegetativo pueden ser obligadas a mostrar su sexo a través de la manipulación de la luz. Al exponer tus plantas a un largo ciclo de luz (es decir las 24 horas del día) por alrededor de una semana, las plantas revelarán rápidamente su sexo. Después de una semana el ciclo de luz debe regresar a la normalidad y al aire libre. Este método es a prueba de fallos, pero tiene un inconveniente. Las plantas dominantes no siempre quieren volver a la fase vegetativa y pueden producir un fallo en el crecimiento al entrar en la fase de floración.

Test de Laboratorio.

Sabiendo lo complejo que puede resultar el tema para muchos productores y los riesgos que se corren al no tener la certeza de si tu marihuana es macho o hembra, muchos laboratorios cannábicos están trabajando para pronto poder ofrecer pruebas de ADN que puede determinar el sexo de una planta a partir de una muestra de hoja no más grande que la uña. Estas pruebas no solo servirán para verificar la genética sino también para determinar las relaciones de cannabinoides probables, lo que seguramente se convertirá en un recurso muy valioso para muchos productores comerciales y para los programas de mejoramiento.